Me muestro fuerte ante el mundo, escondo mi dolor antes los ojos de los demás, pero eso no significa que no sea débil,que no me duela esto que estoy viviendo. Puede ser que inconscientemente me halla puesto una coraza y hago sumiso el dolor.
Recuerdo que hace poco mi padre me dijo “Qué feliz eres” por el simple hecho que me pusiera hacer el tonto y reírme por los baches que habían en la carretera.
Cuando me dan las malas noticias, las asimilo y asiento con la cabeza, no muestro ningún sentimiento delante de mis padres. El destino ya esta preparado y nosotros ahora tenemos que prepararnos también, no podemos hacer que la tristeza nos coma vivos, porque ya sabemos cual va hacer el triste final de esta historia.
Se puede hablar por hablar, el día que pase será otro cuento, las cosas pueden cambiar y que me derrumba como una montaña de arena.
No puedo adelantarme a los hechos porque nunca es preciso lo que vivo, puedo imaginarme que lo superaré bien y que sea todo lo contrario o viceversa.
"(…)Eres tan grande como el sincero abrazo que me diste sin nada a cambio(…) “
Enterrare este dolor, pero no haré que mi corazón te olvide, quiero ser yo la fuerte en los momentos difíciles.
“(…) Llorar y llorar y llorar no servirá de nada cuando te pierda, porque te querré recuperar …”
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